Realizar un swap o cambio de motor en nuestro vehículo, tiene como objetivo mejorar las prestaciones del mismo. Cualquier motor no será válido para hacer un swap aunque pertenezca al mismo fabricante ya que, aparte de tener en cuenta un sinfín de características, también será imprescindible pasar un complejo proceso de homologación.
- El cambio de motor por uno igual al original no se considera reforma; pues en este caso no varían las características o prestaciones del vehículo. Además, no se requiere homologación y podrás superar la próxima ITV sin necesidad de aportar documentación extra.
- El cambio de motor se efectúe por otro de diferentes características si que estaría considerado como reforma, pues entre otras cosas, la potencia variaría y sería necesario también el cambio de otros componentes. En esta situación, es imprescindible realizar la legalización de la reforma en la ficha técnica para poder superar la ITV.
Hay que tener en cuenta que:
- El nuevo motor no puede contaminar más que el anterior.
- El nuevo motor debe ser del mismo año o más nuevo.
- El motor debe estar homologado, así como los frenos y escapes (siempre que se realice el cambio de estos).
- Los elementos mecánicos que vengan de un coche no homologado tendrán que homologarse individualmente.
En 12 Volttios & Personal nos especifican algunas características imprescindibles:
- No podemos sobrecargar el vehículo original.
- Es necesario instalar el escape del vehículo donante.
- En la mayoría de casos también será necesario el cambio de caja de cambios y frenos.
Podéis ampliar la información en 12 VOLTIOS & PERSONAL CAR