La cuenta atrás ha comenzado: en solo tres meses, los tradicionales triángulos de emergencia dejarán de ser válidos en las carreteras españolas. A partir del 1 de enero de 2026, todos los vehículos deberán contar con una luz V16 conectada y certificada, conforme a la nueva normativa de la Dirección General de Tráfico (DGT).
Según el estudio “Conocimiento, actitudes y comportamiento de compra de los conductores españoles en relación con la nueva luz de emergencia conectada V16 obligatoria”, elaborado por Osram, todavía un 65% de los conductores desconoce los detalles de la regulación, y casi un 40% no tiene claro cómo afectará este cambio a la seguridad vial.
Durante la presentación del informe, celebrada en Madrid, Carlos Garrido, Head of Sales Iberia, y Sammr Nasrallah-Goldberg, Senior Director Business Unit Automotive, subrayaron la necesidad de reforzar la información y concienciación sobre este cambio normativo. “Queremos contribuir a que los automovilistas estén mejor informados para que la transición hacia la luz V16 sea efectiva y segura”, señaló Garrido.
Los datos muestran que el 88% de los españoles sigue utilizando los triángulos de emergencia, a pesar de que estos —junto con las balizas V16 no conectadas— dejarán de estar permitidos. Solo un 8% dispone ya de una luz conectada y certificada, y más del 30% desconoce las posibles sanciones, que pueden alcanzar los 200 euros.
Ante esta situación, las empresas asociadas a APTA juegan un papel fundamental. No solo pueden asesorar a los conductores sobre la obligatoriedad y correcta elección de las luces V16, sino también garantizar la instalación de productos homologados y ofrecer información veraz frente a la proliferación de dispositivos falsos o no certificados, una preocupación que afecta al 73% de los automovilistas.
Desde APTA Asociación, recordamos la importancia de anticiparse a este cambio normativo e incorporar la información sobre las luces V16 en la atención al cliente. La transición hacia la nueva señalización luminosa no solo mejorará la seguridad vial, sino que también refuerza la confianza del conductor en el taller de proximidad como referente técnico y de seguridad en carretera.