A partir de julio de 2024 todos los vehículos nuevos que se comercialicen en la Unión Europea deberán incluir el sistema EDR (event data recorder), una especie de caja negra especialmente diseñada para el sector de la automoción que servirá para esclarecer los motivos de un determinado siniestro. El EDR pasa a ser obligatorio a partir de julio de 2022 para nuevas homologaciones.
El EDR registra la información de los 30 segundos previos al impacto y los 5 segundos posteriores. Se encarga de grabar las circunstancias en las que se ha producido el siniestro en el caso de que se active algún elemento del sistema de retención. El tipo y la cantidad de información almacenada puede variar en función de cada fabricante ya que de momento no está reglamentado la estandarización de los datos a recoger.
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Se trata de uno de los sistemas ADAS obligadotorios a partir de julio de 2022. Los Sistemas Avanzados de Ayuda a la conducción, ADAS por sus siglas en inglés, se han convertido en el avance tecnológico más importante en la prevención de accidentes de circulación.
Cómo funcionan los ADAS
Estos sistemas son capaces de percibir el entorno de circulación sin distracciones, y a través de un potente microprocesador, analizar la situación con respecto al riesgo de entrada en situación de peligro. El sistema de forma inteligente avisará al conductor de que ha entrado en una situación de alto riesgo, con suficiente tiempo como para que este pueda corregirla, para evitar el siniestro o en su caso mitigar las consecuencias del mismo.
